«Molsa» de David Cirici sube al escenario del Teatre Lliure en Barcelona
La multipremiada historia de Molsa/Musgo de David Cirici sigue despertando gran interés.
El Teatre Lliure de Barcelona ha programado del 21 de noviembre al 17 de diciembre la versión escénica de esta singular historia de un perro que a causa de la guerra pierde a su pequeña dueña, Janinka, en medio de las bombas y la destrucción de la ciudad.
La compañía de danza THOMAS NOONE DANCE será la encargada de representar esta historia de sensaciones, de supervivencia, de sentimientos, de evocación ante aquel aroma extraviado, pero también de lucha y esperanza por recuperar lo perdido.
Musgo/ Molsa, premio edebé de Literatura Infantil y Juvenil del año 2013, en su edición italiana, Mushio ha sido multipremiada en este país. Al premio «Un libro per l’Ambiente» conseguido el 2016, recientemente ha alcanzado el Premio Strega y recientemente el Premio Cento.
La obra, además de Italia, ha sido traducida en Alemania, Corea, Francia, China, Turquía, Portugal, Holanda Grecia y Eslovenia. La obtención del Premio Strega, en el marco de la Feria Internacional del libro infantil de Bolonia, ha supuesto un interés internacional por los derechos de la obra.
La historia:
Musgo es un perro al que le gusta ir en el cesto de la bicicleta y ver pasar los árboles y las nubes. También le encanta perseguir su sombra entre las sábanas tendidas, correr detrás de los niños o mordisquear el pedal de la bicicleta de Janinka. Es un perro doméstico muy feliz hasta que la guerra lo separa brutalmente de Janinka y Mirek, los niños con los que corretea por la casa y que le hacen cosquillas en la barriga con sus pies descalzos.
Una bomba borra todo lo conocido y deja a Musgo sin casa y sin familia. Sobreviviendo en la ciudad en ruinas, descubre las cosas que no le gustan, como que las tripas le hagan ruido por el hambre, ir lleno de pulgas y garrapatas o que ya nadie le llame por su nombre.
Pero a pesar de los olores tristes de la guerra, Musgo nunca cesará en su búsqueda del ligero olor a picante de su querida y añorada Janinka. En un contexto que nadie entiende, Musgo tendrá que aprender a ser un perro callejero, un perro salvaje, un perro vigilante y hasta un perro de circo.
El camino no va a ser fácil, pero Musgo superará todas las pruebas hasta que su olfato lo lleve de vuelta al lado de los que más quiere.