Recta final del Premio Edebé de Literatura Infantil y Juvenil 2025: 209 originales compiten en esta 33ª edición

• • • • • • • Este 20 de febrero se darán a conocer los títulos ganadores en el acto de entrega de los galardones en Barcelona.
            • Crece el nº de obras presentadas en gallego y en euskera.
            • Cuenta con una dotación económica total de 55.000 €: 30.000 euros para la obra juvenil y 25.000 euros para la infantil.

Esta 33ª edición se han presentado 115 originales en la categoría infantil y 94 en la juvenil, siendo el reparto por lenguas: 162 escritas en castellano, 33 en catalán, 10 en gallego y 4 en euskera. Destaca el aumento de los manuscritos presentados en gallego y en euskera, reflejo de la riqueza y diversidad lingüística de nuestro país y de su creciente vitalidad.

En toda su trayectoria, el Premio ha reconocido 47 obras en castellano, 12 en catalán y 4 en gallego, siendo los ganadores de 2024 Josan Hatero con La guerra de Nico, y Daniel Hernández Chambers, con Reyes de la montaña. Así, año tras año no ha dejado de premiar títulos excepcionales, como atestigua su destacado palmarés, que ya en su primera edición tuvo como ganador en la categoría Juvenil a un por aquel entonces desconocido Carlos Ruiz Zafón con El Príncipe de la Niebla; o las tres obras galardonadas que obtuvieron después el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil, ratificándolas como únicas en su género: Palabras envenenadas (2011), de Maite Carranza, La isla de Bowen (2013), de César Mallorquí, y El efecto Frankenstein (2020), de Elia Barceló.

Desde su creación en 1993, el Premio Edebé ha trascendido fronteras, con 167 ediciones internacionales, traducciones a 22 idiomas y presencia en 25 países, reafirmando la pluralidad idiomática como base para enriquecer nuestras letras y transportar nuestras historias al resto del mundo.

El Premio sigue siendo un semillero de talento y un referente para los amantes de la lectura gracias a su compromiso con la calidad literaria y la promoción de la diversidad lingüística, que hacen de este certamen un motor para la creación cultural y un estímulo para nuevas generaciones de lectores y escritores.